DeMarcus Cousins (20 años y 2,11 m.) es una de las revelaciones del curso sobre el parquet y también se ha convertido en uno de los nuevos 'niños malos' de la NBA.
El novato de los Kings tiene el físico y el talento para llegar a lo más alto, pero su carácter ya le ha jugado malas pasadas en los escasos cuatro meses que lleva en la NBA.
En la NBA la jerarquía de los veteranos es una norma no escrita que el joven DeMarcus olvidó en el partido de los Kings contra Oklahoma City. El ala-pívot protagonizó un serio incidente con Donte Greene, tres años en la NBA y en los Kings, tras recriminarle que no le buscase en la jugada decisiva.
Greene buscó a Tyreke Evans, la gran estrella del equipo, en lugar de Cousins para que se jugase el triple decisivo. Evans, que era la mejor opción de pase en esa decisiva jugada, no acertó y los Kings acabaron perdiendo el partido, lo que desató la ira de Cousins. El enfrentamiento de Cousins (acabó el partido con 14 puntos y 12 rebotes) con Greene fue tan fuerte que Paul Westphal decidió prescindir del novato de cara al partido contra Phoenix, que ganaron los Kings de forma brillante, e incluso fue expulsado del avión y se le impidió viajar con el equipo.
DeMarcus Cousins, número 5 del Draft'10 tras triunfar en Kentucky junto a John Wall, ya ha protagonizado varios incidentes en su corta carrera en la NBA. Ya fue multado por no controlar su carácter y enfrentarse verbalmente a un miembro del cuerpo técnico. Poco después fue expulsado de un entrenamiento por discutir y contradecir de las órdenes de su entrenador, Paul Westphal.
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